Organismos de Derechos Humanos y gremios repudiaron una medida conocida hace pocas horas que da cuenta que personal de las Fuerzas Armadas ingresará en la ex ESMA, donde funcionó el centro de detención clandestino más grande de la última dictadura cívico-militar, que es actualmente un Sitio de la Memoria.
Organismos de Derechos Humanos, gremios como la CTA Autónoma y diferentes personalidades repudiaron una medida conocida hace pocas horas que da cuenta que en la ex ESMA, donde funcionó el centro clandestino de detención más grande de la última dictadura cívico-militar, ingresará personal de las Fuerzas Armadas.
En el predio, que es actualmente un Sitio de la Memoria, se instalará un lugar para la producción de máscaras faciales a cargo de efectivos de las FFAA. «Hay cientos de fábricas paralizadas y talleres autogestionados que podrían dar salida a las necesidades de protección higiénica frente al coronavirus», precisaron desde los organismos.
La iniciativa es impulsada por el Ministerio de Educación que conduce Nicolás Trotta y respaldada por el titular de la cartera de Defensa, Agustín Rossi. En el predio de la ex ESMA, por donde pasaron más de 5.000 detenidos-desaparecidos, se instalará un parque de 1.000 impresoras 3D para la confección de barbijos.
Para realizar esta tarea las Fuerzas Armadas ingresarán al sector donde está ubicado el museo Malvinas e Islas del Atlántico Sur, dentro de la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), que fuera declarada Espacio para la Memoria y Derechos Humanos.
«Es un centro clandestino de horror, de terror», aseguró Emiliano Hueravilo, secretario de Derechos Humanos de la CTA Autónoma bonaerense. Y apuntó: «que vuelvan las Fuerzas Armadas a utilizarlo bastardea todo el esfuerzo y la lucha de años que llevaron adelante miles de compañeros y compañeras que han logrado utilizar ese espacio como espacio de memoria».
Repudio de los organismos de derechos humanos
Los organismos de derechos humanos salieron a cuestionar y repudiar la iniciativa.
Desde el Encuentro Memoria Verdad y Justicia (EMVJ) señalaron que «nuevamente se pretende convertir a la ESMA en un espacio donde consumar la resignificación, la banalización, la reconciliación y la ‘vuelta de página’, buscando borrar lo que es: un Centro Clandestino de Detención y Exterminio en el que fueron secuestrados, torturados y asesinados miles de compañerxs».
Los integrantes del EMVJ exigen el inmediato retiro de las FFAA. del predio de la ESMA, tras recordar que «fue una lucha de años conseguir que los uniformados genocidas se retiraran de los campos de concentración para construir sitios de memoria. No aceptamos esta decisión que pretende ignorar décadas de lucha del movimiento de derechos humanos para expulsar a los militares de estos lugares».
Para finalizar, señalaron que rechazan «el planteo del presidente Alberto Fernández: no hay vuelta de página, no queremos la reconciliación con las FFAA. Del mismo modo que rechazamos categóricamente su participación en los vuelos de vigilancia sobre centros urbanos con la excusa de la cuarentena o el reparto de comida en las barriadas por parte del Ejército y el ciberpatrullaje».
Por su parte, el Encuentro militante Cachito Fukman (EMCF) también se pronunció sobre lo que considera un «nuevo y aberrante paso hacia la reconciliación con los verdugos dado por los ministros de Educación, Nicolás Trotta, y de Defensa Agustín Rossi, extendiendo la impunidad de los genocidas en todos los ámbitos sociales», por lo cual exigen el retiro inmediato de la propuesta gubernamental de que ingresen fuerzas militares a la ESMA a desarrollar cualquier tipo de actividad.
Y agregan: «Bajo la excusa de fabricar barbijos, se pretende nuevamente resignificar el sentido histórico del Sitio de Memoria ESMA. La cultura de la reconciliación con quienes ejecutaron el genocidio que atentó contra la médula en nuestro pueblo los acerca al peligroso límite con la complicidad».
«El gobierno de Alberto Fernández da más pasos en la resignificación de los centros clandestinos de detención tortura y exterminio afrentando a la memoria colectiva. Después de que en el lugar se realizaran talleres, murgas, asados, fiestas, cursos de cocina, etc., etc., ahora se les abre la puerta de la ESMA a las Fuerzas Armadas, las que torturaron, violaron, asesinaron, robaron bebés…. Y ahora este gobierno les pide colaboración y que se pongan a confeccionar barbijos y máscaras faciales para ser usados por miembros de las fuerzas de seguridad, las mismas que hoy que reprimen y detienen como terapia de choque, a los trabajadores que son despedidos en esta situación de emergencia sanitaria. Ciertamente hay cientos de fábricas paralizadas y talleres autogestionados que podrían dar salida a las necesidades de protección higiénica frente al coronavirus», concluyen.
Finalmente, la Asociación de Ex Detenidos – Desaparecidos también rechazó la iniciativa. «La ESMA, por donde pasaron más de 5.000 compañeros y compañeras durante la última dictadura genocida, es un lugar al que se mira como un predio inmobiliario y no como un campo de concentración en el que fueron torturados, secuestrados y asesinados miles de personas».
Gentileza de: El Tribuno