Acaba de regresar a su rincón de la huerta murciana desde donde partió hace unos meses dispuesto a presentarse, con localidades prácticamente agotadas, en el Teatro Caupolicán de Santiago de Chile (5.000 localidades) y en el Centro Cultural Konex de Buenos Aires (3.000 localidades), ciudad, esta última, elegida para grabar su quinto álbum de estudio en complicidad con el músico y productor Diego Pérez (Tonolec, Nación Ekeko) y el ingeniero ganador del Grammy Latino, Matías Cella (Drexler, Kevin Johansen, …).
Lo que iba a ser un viaje estimulante pero usual en la vida del músico, que ya desde algunos años se mueve constantemente a uno y otro lado del charco, se convirtió a raíz de la crisis del Covid19 en una situación completamente extraordinaria.
Con las fronteras cerradas y la imposibilidad de regresar a Europa, lo que iba a ser una breve estadía de retiro creativo acabó siendo una larga temporada introspectiva de composición, lo que iba a ser un leve acercamiento a las culturas y sonoridades sudamericanas terminó por convertirse en una experiencia totalmente inmersiva que sin duda quedará reflejada en «La Sangre del Mundo», el álbum que ahora está en proceso de mezcla y masterización y que no podremos escuchar completo hasta comienzos de 2021 pero del que tendremos algunos avances en el otoño europeo, la primavera austral.
Un disco en el que Muerdo inicia claramente una nueva etapa sonora como ya presagiaba el «Fin de la primera vida» gira y disco acústico recopilatorio con el que el artista se despedía de los escenarios a comienzos de año días antes de emprender vuelo a nuevas latitudes y nuevos sonidos.
En este nuevo trabajo, que supone un viaje de «Ida y vuelta» transitando ritmos principalmente mediterráneos, andinos y tropicales, Muerdo se afianza como una propuesta íntimamente ligada al folclore y los sonidos étnicos, pero en esta ocasión, despojado de todo prejuicio, se atreve también con sintetizadores, programaciones, samplers, loops y todo tipo de ornamentaciones electrónicas.
El LP cuenta con las colaboraciones especiales de Lido Pimienta, Niño de Elche y Perotá Chingó, y en su grabación han participado músicos de primer nivel y gran talento como Martin Brhun (Depedro, Calamaro…) Javi Casalla (Bajofondo) o el propio Diego Pérez, productor musical del disco.
En este contexto, y al margen del nuevo trabajo en si mismo, surge «Contágiate» una canción nacida en plena pandemia y con la vocación de ser también pandémica. Un tema que narra la utopía del amor, la solidaridad y la alegría como emociones virales y altamente contagiosas, que nos invita a entregarnos al abrazo sin miedo y que está enmarcado en una producción sencilla, fresca y poco pretenciosa.
«No tengas miedo, contágiate, baila la vida y no te la guardes para después