Y otra vez los noticieros se relamen con tu sangre, otra vez las botas se lustran orgullosas de ser muerte y otra vez el aplauso aprobador de las lacras que nos gobiernan y que navegan este barco cargado de odio y estupidez. Otra vez las siniestras miradas se funden en la pantalla acompañando las más perversas palabras. Y entonces las redes se llenan de trolls, conocidos y desconocidos, y yo me pregunto, ¿cómo no te destroza ver morir a un niño así? ¿Cómo es que te estremece la imagen de una criatura muerta en medio de una guerra pero te provoca goce ver como un ser siniestro, cuya única fortaleza es portar un arma cobarde, asesina por la espalda a un niño? ¿Dónde escondes tu sensibilidad, de dónde sacas ese lúgubre y siniestro deseo de verlos morir así? ¿Por qué miras para otro lado? ¿Acaso estás anestesiado/a?
Este mismo mundo que condena su existencia, los juzga y los abandona física y emocionalmente les exige que, en sus cortos años, puedan discernir envueltos en el horror, la violencia y las carencias. Y entre tanto, los de arriba, siguen robándoles oportunidades a diario, opacándoles la infancia, oprimiéndolos y desgajando su inocencia. Y ahí estas vos, callada/o y condescendiente porque, si en la caja boba dicen que era un chorro, entonces, se lo busco. Y así se despliega y se esparce el discurso meritocratico como una chorreadera que todo lo justifica. Toda desigualdad se vuelva ley y la educación con oportunidades para pocos y un mundo laboral cada día más esclavizante y alienante es moneda corriente. Y entonces el destino del plomo que calzan sus armas homicidas, y que callan tus silencios cómplices, son la muestra más certera de lo que ellos llaman el bien merecido.
Cómo no sentirse Cronopio en este mundo, tan bestial y desalmado.
Palabras para Facundo
Que vuelvas Facundo! Que vuelvas a tu casa, a tus juguetes. Que vuelvas Facundo! A la canchita, a tus amigxs, a los días previos del cole, a la merienda en casa de la abuela, a tus picardías, a tus juegos. Que vuelvas Facundo! Que vuelvas a tus sueños, a tus deseos, a tus ansias, a tus nervios,a tu felicidad, la de lxs niñxs y porque no, a tus tristezas. Que vuelvas Facundo!! Que vuelvas a tus pequeños años, a tu carita sonriente, a tus ojitos achinados, a tu mirada tierna y a tu sonrisa pícara. Que vuelvas Facundo!!! A los brazos de tu abuela, a extrañar a mamá y a anhelar el regreso a casa. Que vuelvas Facundo!!! Que vuelvas con Kevin, Luciano, Rafita, Santiago y con tantxs otrxs. Que vuelvan!!! Que se vayan ellos!!!!!
12 años, ejecutado por la policía tucumana de un balazo en la nuca.
9 años, estaba en su casa y murió por un balazo que llegó desde afuera, donde peleaban dos grupos narcos cuando Prefectura liberaba la zona.
16 años, torturado y desaparecido por la negativa de salir a robar para la policía de La Matanza. Luego de varios años encontrado como NN en el cementerio de la chacarita.
22 años, practicaba diferentes oficios y en un operativo de las fuerzas de seguridad, recibió un tiro por la espalda que le quitó la vida.
Santiago Maldonado
28 años, desapareció tras la violenta represión de Gendarmería en la Lof en resistencia Cushamen, Chubut. Estuvo desaparecido 78 días. Su cuerpo sin vida a 400 metros río arriba de donde fue visto por última vez.