Quiero curar, pero mis manos /
solo tocan Amor.
– “Estaba en llamas cuando me acosté”
Si uno entra en la más alta y magnífica autoridad de la lengua española la palabra random parecería ser inexistente. Como bien sostiene la Real Academia, su trabajo no es otro que “limpiar, fijar y dar esplendor” al lenguaje. A través de los años Charly García le demostró al mundo que su Arte nace y vive a las sombras de la autoridad, que no necesita ser “limpiado” porque en sus impurezas radica la frescura y el vigor de las grandes voces. Le demostró al mundo, también, que no necesita ser “fijado”, porque es su flexibilidad lo que golpea con irreverencia todas las épocas.
Bajo el nombre Random, García engloba las diez piezas que compaginan el nuevo disco cuyo lanzamiento se dará el día 24 de febrero. Si su corte de difusión, “La máquina de ser feliz”, resulta un microcosmos del resto de esta obra, podemos establecer una línea de continuidad quasi directa desde Say No More en adelante. Ravel, la inocencia, Chopin y la Luna arman su historia. Y el artista vuelto vicio, vuelto verde, vuelto cisne se hace viento y flota, entre el llanto, la soledad y la búsqueda constante de la felicidad.
Tras casi 50 años de carrera musical, 30 discos de estudio encima, innumerables presentaciones, y habiendo formado parte de algunas de las bandas más emblemáticas y productivas del rock nacional, Carlos Alberto García Moreno sigue desafiando el presente, sigue marcando la historia.
Hermosa definición de su obra y de su espíritu infinitamente revelador y misterioso a la vez Say no More que bella noticia escucharte nuevamente
Bravisima crónica!!