Walter Ceferino Nadal fue detenido y asfixiado hasta la muerte por la policía de Tucumán. Gritaba que no podía respirar al igual que George Floyd en Minnesota, Estados Unidos. Norma, la hermana de Ceferino, apuntó contra las autoridades provinciales en dialogó con Hasta que vuelvan los abrazos, por La Retaguardia.
«Esto ocurrió el miércoles 24 de junio, aproximadamente a las diez de la mañana. Supuestamente venía robando, pero a él no le encuentran nada y tampoco hay una víctima que lo acuse. Lo que sí, él era hostigado por la policía. Mi hermano cumplió una condena en su momento, tiene antecedentes, pero ya hace cuatro años que estaba libre y desde ese momento lo hostigaron. Tal es así que si ven el video, cuando lo detienen, él le grita a una persona que estaba ahí ‘sacame el celular que me lo van a robar’ porque la policía donde lo encontraba lo paraba y le quitaba todo lo que tenía encima», comenzó a contar Norma acerca del video del arresto de su hermano, Ceferino Nadal, que circuló hace algunos días. Las imágenes de ese momento son muy similares a las que recorrieron el mundo el 25 de mayo, cuando un policía asfixió con su rodilla a George Floyd mientras lo detenía. Hay otro dato que iguala ambos casos: Nadal y Floyd manifestaron reiteradas veces que no podían respirar.
«Es más, en el mes de febrero -el 17 de este año- hay una causa en tribunales porque Ceferino sale de su casa para cargar el celular y lo detienen por nada. Y en la comisaría le dan una paliza donde el pierde varios de sus dientes. Eso sucedió en la 1° de Tucumán. Todo el tiempo el hostigamiento», agregó Norma. Y continuó dando detalles del asesinato de su hermano: «Ese día él había salido al centro, lo vieron y sucedió todo lo que se ve en el video. Nosotros estamos muy enojados con el ministro de Seguridad de la Provincia (Claudio Maley), porque él saca a relucir los antecedentes de mi hermano, o sea que ataca a la víctima para justificar el hecho de los victimarios. Y hoy por hoy hay un supuesto ladrón muerto y unos supuestos asesinos que siguen trabajando como si nada. El ministro también falta a la verdad porque sale a decir en los canales de la provincia que mi hermano sufría problemas respiratorios. No sé de dónde se agarra para decir semejante cosa porque mi hermano no tenía ningún problema. Yo quisiera que me muestren evidencia de algo. Y, más allá de todo, justificar el accionar de la policía no se puede creer. Lo mínimo que esperábamos era que apartaran de la fuerza a estos policías, pero no sucedió nada de eso. Y nadie más que la prensa se ha comunicado con nosotros. Ninguna autoridad, nadie», denunció.
Una vez notificada de la muerte de Ceferino, su familia tuvo que enfrentar el destrato de la policía y la justicia: «Cuando ocurre todo esto, nosotros llegamos al hospital y se nos dice que el cuerpo nos iba a ser entregado al día siguiente por la autopsia. Nos dirigimos a la Comisaría 1° para pedir las pertenencias de Ceferino, que eran su celular y las llaves. El jefe nunca salió a dar la cara. La gente de turno que estaba en la recepción nos dijo que teníamos que ir a la fiscalía, pero en la fiscalía no pasa nada por la cuarentena. Y el abogado se comunica con la fiscalía y ya siendo de noche nos dicen que no tenían aviso de que había habido intervención policial en la causa. Entonces ellos se manejaron mal: labraron un acta que decía cualquier cosa menos lo ocurrido, porque seguramente no se imaginaron que iba a haber un testigo con un video. Lo pintaron de una manera y fue de otra. Es más, si no fuera por este video hubiese quedado todo en la nada», relató.
Lo que pasó el miércoles pasado no fue algo nuevo, según describió su hermana. «Él salía a la calle y donde lo veían, lo paraban. Le sacaban lo que tenía, lo llevaban preso. Si andaba en el centro lo paraban y le ponían una contravención. Un montón de veces le han pegado. No era libre de andar por ningún lado porque por donde lo veían, lo levantaban, le quitaban sus cosas. Nunca le han dado la libertad para que ande por la calle», finalizó su nota con La Retaguardia.
La autopsia indicó que Ceferino Nadal murió por asfixia, luego de ser reducido por la policía apoyándole la rodilla en el cuello, cuando lo habían acusado de robar una gorra en un supermercado chino en la Provincia de Tucumán.
Testigos contaron que el uniformado presionó el cuello del sospechoso contra el suelo luego de reducirlo a pesar de que la víctima le decía que no podía respira. La Policía había indicado que al ser detenido sufrió un infarto, pero luego de varios días la autopsia determina que no fue así, Ceferino Nadal de 43 años fue asesinado luego de haber sufrido “comprensión violenta del cuello, lo que produjo la interrupción normal del aire a la vía aérea, y del flujo sanguíneo por un mecanismo isquémico, produciéndose asfixia de tipo mecánica”.
Nadal perdió la vida rumbo al Hospital Padilla. Allí llegó con el esternón y cinco costillas fracturadas, daño presuntamente correspondiente a maniobras de resucitación.